Daniel 7:8-10

La Biblia de las Américas

⁹ Seguí mirando
hasta que se establecieron tronos^(C),
y el Anciano de Días se sentó.
Su vestidura era blanca como la nieve^(D),
y el cabello de su cabeza como lana pura,
su trono, llamas de fuego^(E),
y sus ruedas, fuego abrasador^(F).
¹⁰ Un río de fuego corría,
saliendo de delante de Él^(G).
Miles de millares le servían,
y miríadas de miríadas estaban en pie delante de Él^(H).
El tribunal se sentó^(I),
y se abrieron los libros^(J).